MARCO TEÓRICO

El proyecto abreva del enfoque de las tecnologías de la información y la comunicación para el desarrollo (ICT4D, por sus siglas en inglés) que desde la teoría y la práctica responde a cómo los diferentes grupos sociales acceden a las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) y cómo este acceso contribuye a brindar ventajas para su desarrollo humano (Heeks, 2009).

El reto en este campo de estudio ya no está en responder a la pregunta ¿qué tan grande es la brecha?, sino en ¿cómo diseñar políticas que cierren las brechas más significativas? y ¿cómo ofrecer bienestar para todos? Las nuevas perspectivas del desarrollo reconocen que el bienestar no depende solo de las condiciones materiales, sino de la calidad de vida (QoL, por sus siglas en inglés) de las personas, y que esta se relaciona con la libertad para alcanzar la vida que se quiere vivir.

El enfoque de las capacidades de Amartya Sen (2010), que entiende el desarrollo como la ampliación de libertades u oportunidades para que las personas alcancen mejor QoL, ha inspirado muchos trabajos en todo el mundo y en diferentes disciplinas.

La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE, 2017), lo retoma para diseñar un marco para medir el bienestar en los países miembros. Dicho marco identifica algunos de los ingredientes clave que se asocian a una buena vida y a los que todas las personas deberían tener acceso. Lo aterriza en 11 dimensiones del bienestar (condiciones materiales: vivienda, ingresos, empleo; dimensiones de QoL: salud, balance vida-trabajo, educación y habilidades, conexiones sociales, compromiso cívico y gobernanza, calidad del medio ambiente, seguridad personal y bienestar subjetivo) y cuatro recursos de reserva (capital natural, capital económico, capital humano y capital social).

Este proyecto pretende observar el peso de las TIC en dichas dimensiones, lo que alimenta a la operacionalización de estas dimensiones.